DIENTES BLANCOS, DIENTES SANOS.

El blanqueamiento dental es una excelente opción para tener unos dientes sanos.

La gran mayoría de personas sueñan con tener unos dientes blancos que reflejen naturalidad y autoestima, esto lo pueden lograr gracias al Blanqueamiento Dental, un procedimiento Odontológico que va dirigido a todos aquellos pacientes que presentan cambios ligeros o severos de color.

Este es un tratamiento dental estético cuyo producto final son dientes blancos y brillantes, lo cual se convierte en una necesidad para triunfar en la vida profesional y social. Unos dientes blancos son sinónimo de limpieza, sanidad y juventud. El blanqueamiento dental elimina manchas producidas por factores intrínsecos, es decir, provocados en la etapa de formación del diente, producidas por antibióticos, manchas congénitas en el esmalte dental y fluorosis, manchas por exceso de flúor.

También puede ser por manchas causadas por factores extrínsecas, es decir que son causadas por el té, café, cigarrillos, vino tinto y distintos alimentos. El blanqueamiento dental no provoca dolor ni  desgaste dental, para el procedimiento se puede realizar de manera externa e interna, es decir, que si el blanqueamiento es externo, se realiza sobre dientes vitales, aplicando una sustancia en la parte externa de la pieza dental.  Pero si es interna, que es la más recomendada, esta es realizada por un odontólogo especialista, que consiste a través de luz fría de arco completa y peróxido de hidrógeno al 35%.

Realizarse un blanqueamiento dental en un consultorio, hace que los dientes estén más blancos, además de estar controlado por un profesionales y mayor penetración y liberación del gel. Produce limpieza y  protege la encía.